La reina del Pop, Madonna, llegó totalmente resguardada a una fiesta en Nueva York. La cantante celebró Purim vestida de Charlie Chaplin.
El traje negro que Chaplin usó en su ya conocido papel, hizo que Madonna luzca totalmente irreconocible la noche de la fiesta.
La cantante no asistió sola a la velada, su amigo, el famoso fotógrado Steve Kelin y sus hijos Lourdes de 14 años y Rocco de 10 también acompañaron a la diva.
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